“El amor es una lucha de poder”, era una frase de cabecera de Fernando Ulloa, médico, psicoanalista, y precursor de la carrera de psicología de la UBA. El amor y el poder, en conjunción, es el centro neurálgico de Plagio, la nueva obra dirigida por José María Muscari, escrita por el propio Muscari y Mariela Asensio (dupla autora de Perdida Mente), y protagonizada en duplas en diferentes días por Inés Esteves y Malena Solda, Esther Goris y Nicolás Riera, Diego Ramos y Nicolás Pauls, y César Bordón y Thelma Fardín.
En el estreno para prensa y famosos en el Teatro Regina, los presentes pudimos ver una función especial por única vez, una decisión que tomó el director Muscari y lo explicó a los presentes antes de levantar el telón: “van a ver todo el texto de la obra pero alternando las parejas para que puedan ver un poco de cada una. Y también la pueden grabar para darle difusión”.
Un fósforo puede provocar un incendio cuando habitan en un cuarto dos personas con la misma potencia de amor y de poder, pero más aún se encienden las llamas -más peligrosas que de pasión- cuando se trata de dos amantes como sucede en Plagio.
Un/a candidato/a a presidente y el asesor/a leal de la primera hora, ingenioso/a de los discursos que el otro brinda ante la multitud para ganar votantes, pero que ambos saben que plagiaron frases de una película de Netlfix.
Y ese relato que arranca con pasión, deseo sexual, y también unas primeras recriminaciones al ser la/el segundo/a, despiertan miserias humanas que van apareciendo en el relato, de menor a mayor, y que uno, desde la platea, pude encontrar en la sociedad o haberlas vivenciado en sus propias experiencias de parejas: ambición, psicopatía, vanidad, ego, manipulación, y extorsión entre otros actitudes horribles que están en los seres humanos cuando todo se está por derrumbar.
José María Muscari eligió que todo suceda entre cuatro paredes, en la intimidad de una especie de penthouse de Puerto Madero diseñado por la escenógrafa Graciela Galán, y donde los amantes, que manifiestan estar enamorado del otro, luchan entre el amor, el secreto imposible de revelar, y la ambición de llegar a Casa Rosada. Ahí, justamente en ese barrio capitalista, donde en la vida real viven hoy los poderosos políticos de nuestro país.
Los cuadros divisorios de los diferentes momentos que interpretan los actores y actrices son anunciados en la pantalla ubicada detrás del escenario para ubicar en contexto a los espectadores: “Mercurio Retrógrado”, “Hastío”, “Redes”, “Suciedad”, “Carroña”, “Asco”, “La verdad”. En todos hay mucha pasión, búsqueda de reconocimiento, pero también frialdad/crueldad. Como se dice, van mostrando la hilacha.
Muscari y Asensio saben encontrar los tonos para hacer de un drama darle en condimento justo de comedia para descomprimir. Las acciones, como en toda tragedia, en este caso amorosa y política, con fecha de vencimiento, producen risas que llegan después del nudo en la garganta y de la incomodidad. Bien resuelto acá también como lo hicieron en Perdida Mente, hablar de un tema de salud mental, una cuestión seria y poder brindarle entretenimiento liviano y divertido.
La elección de las duplas están bien balanceadas en composición y physic du rol: Inés Esteves, una presidente al estilo Birgitte Nyborg Borgen (serie de Netflix, mírenla) y la siempre justa Malena Solda, la gran Esther Goris con -“el pendejo” como reza el texto- Nicolás Riera que tiene un bello momento tocándole Wicked Game de Chris Isaak con la guitarra criolla mirando a su amante que le dobla la edad. Instante que despertó los aplausos de la platea. “Como me calentas cuando cantas asi”, dice el personaje de Goris.
La otra pareja gay protagonizada por Diego Ramos y Nicolás Pauls posee intensidad, pasión y toxicidad necesaria para contar el relato con un tono diferente, por ejemplo, al que tienen Esteves y Solda, y darle verisimilitud a las escenas.
César Bordón (quien ya interpretó a un político en Relatos Salvajes, en aquel caso fue un intendente) tiene el porte, el tono, y el outfit del antiguo político que solo piensa en el poder, y Thelma Fardín posee esa ingenuidad y vehemencia de una joven enamorada pero un fuerte deseo de ser la primera dama aunque sabe que será oculta más allá de su ilusión. Hay entrega de todos, en cuerpo, en texto, en todo.
“Muscari nos decía quiero más, más piel, más sexo, más pasión, que vayamos al límite”, contó Riera cuando vino al piso de Implacables con Esther Goris previo al estreno del público. Y eso, realmente, se nota muchísimo.
Plagio tiene frases muy reales que le dan peso al texto de lo que se está viviendo en esa tensión arriba del escenario: “yo te inventé”, “mirá que si me dejas voy a contar la verdad”, “ah, ahora que ya me cogiste te vas”. Y también es acertada la elección del sonido para separar los tópicos y darle un final con Hentai, de Rosalia, que es ese puñal final de un departamento que terminó en cenizas.
Por eso, el gran Ulloa tenía razón, en su otra frase de cabecera: “la ilusión termina siendo una estafa”.
En la presentación del martes 5 de junio estuvieron en el Teatro Regina Susana Roccasalvo, Edda Bustamante, Mariana Genesio Peña, Leandro “Chino” Leunis, Daniela Cardone, Gerardo Romano, Iliana Calabró acompañada por su novio Luis, Cachete Sierra, Adabel Guerrero, Noelia Marzol, Dan Breitman, Sabrina Carballo, Juampi Gonzalez, Anabel Cherubitto, Gabo Usandivaras, Hernán Lirio, Celeste Muriega, Ernestina País, Nara Ferragut, Milita Bora, Aldo Osorio, Esteban Prol y Flor Marcasoli, Mirta Wons, Coty Romero, Alexis “Conejo” Quiroga, Gabriel Machado, entre otros.
Dirección: José María Muscari
Dramaturgia: José María Muscari y Mariela Asencio
Producción General: Paola Luttini y Pronoia Producciones
Iluminación: Eli Sirlin
Escenografía: Graciela Galán
Vestuario: Javier Tschudy
Estilismo: Andrea Galanti
Maquinista Stage: Gerónimo Carboni
Diseño Gráfico: Daniela Frega para Enchulame Contenidos
Producción Ejecutiva: Marcelo Gargano
Asistencia de Dirección: Mariana Melinc
Redes y Audiovisual: Eric Baez para Enchulame Contenidos
Prensa: Ale Benevento para Agencia ABB
Qué día ver cada pareja: Inés Estévez (Rebeca) y Malena Solda (Sofia) están los viernes, sábados y domingos; Diego Ramos (Martiniano) y Nicolás Pauls (Tomás) suben a escena los martes y miércoles.
Esther Goris (Lucrecia) y Nicolás Riera (Joaquin) están los viernes, sábados y domingos; y César Bordón (Guido) y Thelma Fardín (Mía), los domingos 21.30h.
Entradas: boletería Teatro Regina (Avenida Santa Fe 1235) o por plateanet.
Gustavo Mendez es un periodista, productor y locutor argentino con más de 16 años de trayectoria en diferentes medios del país. Nacido en San Nicolás de los Arroyos, comenzó su carrera en el periodismo a temprana edad y desde entonces ha trabajado en diferentes medios importantes de Buenos Aires: Diario Perfil, Perfil.com, Radio Nacional AM 870, Radio El Mundo AM 1070 y Nacional Rock FM 93.7, Revista Gente Online, y en Infama (América), Confrontados (El Nueve) y actualmente en Implacables (El Nueve).
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