Los 5 motivos de por qué se agotan tan rápido las entradas para los recitales

Los tickets vuelan aunque los precios sean exorbitantes para ver a Taylor Swift, Red Hot Chilli Peppers, Luis Miguel o Tan Biónica.

Taylor Swift, entrada más cara, $175.000 + costo de servicio, Red Hot Chilli Peppers, entrada más cara $48.000 + costo de servicio, Roger Waters, entrada más cara $56.000 + costo de servicio, Luis Miguel vendió 400.000 entradas en menos de 24 hs., Joaquín Sabina llenó los Movistar Arena, Rosario, y Córdoba, y Tan Biónica, va por el tercer estadio, con entrada más cara $30.000 + costo de servicio.  

Lo que llama la atención de este fenómeno es que Argentina vive una de las peores crisis económicas pos 2001, una inflación sin freno, salarios que pierden capacidad de ahorro, y un dólar blue que aumenta y aumenta y se siente como una olla a vapor a punto de ebullición. Sin embargo, conseguir un ticket para ver los recitales de las estrellas internacionales, sin importar su valor, convierten a los argentinos en participantes de los Juegos del Hambre.   

¿Por qué sucede este fenómeno cuando antes no sucedía? Porque realmente antes nos sucedía. Nadie me lo contó. Me puse a recordar que hace unos años, cuando trabaja en el Diario Perfil, fui a ver a Madonna, Bon Jovi, Sting, Guns and Roses (sin Slash), Aerosmith, U2, Metallica, entre otras tantas bandas emblemáticas, y siempre había espacio en los estadios, y por eso habían también invitaciones de prensa disponibles. 

Me acuerdo que invité a mi amigo Ezequiel Glorio a ver Bon Jovi en el Estadio de Velez y el Campo delantero/VIP estaba en un 50%, con espacio y super cómodos, al igual que había butacas libres en la platea del Monumental para ver a Madonna con su gira MDNA. También cuando fui a ver a Daddy Yankee en el Luna Park en su mejor momento.  

¿Qué pasó? ¿Por qué ahora no hay tickets, las invitaciones de prensa son mucho menos que las de antes, y en los recitales no caben un alfiler? 

¿Por qué hay 3.000.000 de personas esperando poder adquirir un ticket para ver a Taylor Swift que viene por primera vez al país con su The Eras Tour? ¿Por qué hay tanta devoción por Luis Miguel en vivo cuando antes no sucedía?

Los 5 motivos de por qué hay extrema demanda de entradas para ver a los artistas internacionales: 

  • Los pesos no sirven para nada. «Hay que quemarlos», dicen algunos. Otros, en ronda de amigos, «¿para qué me los voy a guardar? ¿Un ticket son 80, 100 dólares al blue, qué voy a hacer con eso ahorrado? Nada». «¿Me puedo comprar una casa, un terreno, una moto, un auto, puedo viajar con eso que me ahorro y no me permito disfrutar?».

 

  • No poder viajar al extranjero. Por los impuestos, el valor del dólar blue, y la inflación, la clase media argentina ya no viaja tanto como antes al extranjero, entonces disfrutar de un concierto de una estrella internacional que llega al país con su gira mundial es la única manera de «viajar» y consumir algo del extranjero (de calidad) en nuestro país y pagarlo en pesos. El que paga una entrada sabe que ese show que va a ver lo ve el millonario de Nueva York, Londres o París. Cuando el dólar era otro, y no había restricciones, se fugaban solo de divisas de turismo unos 10.000 millones de dólares, muchísimos argentinos, viajaban de vacaciones y -de paso- ver a sus bandas favoritas tocar en tal ciudad del mundo. Hoy lo piensan diez veces. Hay 100% de impuestos. Entonces la competencia es más feroz para conseguir una entrada acá en nuestra tierra golpeada. Al extranjero, a ver a Ed Sheeran o Beyoncé, viajan los millos solamente. No mueven la aguja. 

 

  • Las redes sociales. A diferencia de los años 80, 90, y 2000s, hoy los fanáticos son muchos más fanáticos que los de aquellas épocas. Los seguidores no le pierden pisada 24/7 a sus fans sea en Instagram, Twitter, Tik Tok, YouTube, son múltiples las formas de consumir al artista más allá de su obra sin tener que ir a una revista especializada para conocer más en detalle y que hacen más exponencial la admiración por la banda o artista. Desde la pantalla del celular, ya incorporas «la droga» diaria sobre tu artista favorito, GRATIS, y verlo en vivo es, por supuesto, el elixir de todo fan, y algo que no se piensa. Se hace. 

 

  • La pandemia. Estaba en la fila 2 de la función de prensa de la obra Plagio, de José María Muscari, y al lado mío me encontré a Anabel Cherubitto que hacía poco nos había visitado en el piso de Implacables. Y entre las cosas que hablamos salió este tema. Y ella me dijo: «la pandemia también cambió la mentalidad de la gente, las personas quieren disfrutar, perdieron a muchos familiares, y no sabes qué puede pasar. Fue como una película de terror». Me quede mirándola y le dije: «tenés razón, lo voy a sumar si escribo algo como un tercer motivo y menciono este momento que compartimos previo a la función».

 

  • Vivir experiencias. El ser humano está ávido de vivir experiencias que se liga también con el anterior punto de lo que nos provocó la pandemia por coronavirus. En el recital de Coldplay, que batió un récord de 10 estadios de River Plate totalmente sold out, había familias enteras. Ya no es más una vivencia del fanático, ya la familia se acopla y deciden compartir un momento único, maravilloso e inolvidable. Las ganas de compartir afloran en viajes y también en recitales. 

 

  • ¿Ustedes creen que hay más motivos? 

 

 

 

También puede interesarte

El principe de la bachata
Aldo Funes obra 2025
Fatima Miami

Últimas noticias

El principe de la bachata
Aldo Funes obra 2025
Fatima Miami
Santuario y laguna san nicolas 2024
Belen Francese
Ale Matias Teatro Mar del Plata