El Consejo de Administración del Hospital recibió al secretario de Gestión Sanitaria, Alejandro Vilches, y al subsecretario de Institutos y Fiscalización, Enrique Rifourcat, quienes informaron los detalles de la nueva modalidad de becas para los residentes en formación.

La reunión, en la que participaron la presidente del Consejo, Mariel Sánchez, y los consejeros Jorge Menehem y Roberto Dalmazzo, permitió intercambiar miradas sobre los cambios que propone esta normativa, orientada a jerarquizar la etapa de residencia y brindar mayor libertad de elección a quienes inician su camino profesional.

A través de este nuevo reglamento, se busca ordenar y transparentar el sistema, reconociendo a la residencia médica como una instancia de formación profesional, manteniendo los cupos y garantizando un mayor crecimiento profesional.

¿En qué consiste la nueva modalidad?

Desde ahora los residentes tendrán la oportunidad de elegir entre dos opciones de beca para su formación profesional. La Beca Institucional, es la novedad. Les permitirá tener un contrato directo con el Hospital, cobrar sin descuentos de aportes y cargas sociales, contar con los seguros —ART, mala praxis y salud— cubiertos por la entidad y acceder a bonos adicionales.

Por otra parte, tendrán la alternativa de elegir o mantener la Beca del Ministerio. Bajo esta modalidad, el contrato depende del Ministerio de Salud y cuenta con los descuentos habituales por aportes y obra social. El Hospital sigue siendo el responsable de garantizar los seguros. Esta modalidad de beca es la existente y el marco bajo el que se encuentran actualmente todos los residentes.

En ambos casos, la formación seguirá siendo financiada por el Estado Nacional, pero desde ahora los residentes podrán elegir los términos de su contratación.

Durante el encuentro, tanto las autoridades del Hospital como las del Ministerio coincidieron en que los residentes, a partir de esta modificación, cobrarán más y podrán elegir con libertad. A su vez, resaltaron el ordenamiento del caos heredado priorizando el mérito y no el ruido sindical.